En el debate está siendo juzgado Francisco Amador, expareja de Rago Zapata (19), acusado de matar a la víctima de 23 puñaladas. El crimen ocurrió en 2010, cuando todavía no existía la figura de "femicidio", por lo que la pena que la cabría sería de 8 a 25 años de prisión (homicidio simple).