Tras el 0-0 en la Bombonera, el equipo de Almirón igualó 1-1 en Brasil y ganó desde los doce pasos por 4-2 para acceder a la definición continental ante Fluminense. El arquero Xeneize fue la gran figura (con dos penales contenidos), en un choque que Boca tuvo que aguantar, sobre todo la ùltima media hora, por la expulsión de Marcos Rojo.