Tras confesar el crimen en una comisaría, el femicida Jorge Rojas quedó detenido a la espera de ser indagado. Agustina Yoselie Nadal Herrera era buscada tras una denuncia debido a que no se había presentado a trabajar en la Base Aeronaval Comandante Espora, donde ambos se desempeñaban como soldados voluntarios.