Cuando el agua vale más que todo
En la Argentina de los últimos años, el concepto de la “megaminería” viene levantando posiciones, intereses y pasiones encontradas. Por un lado es señalado como una necesaria inyección de riqueza para, de una vez por todas, impulsar el crecimiento económico del país. Pero por el otro, como muestra este reportaje de la revista Crisis, los proyectos del sector corren el riesgo de hundirse en situaciones irregulares, no solamente desde el punto de vista económico o político sino -lo que es más importante- en el frente de su impacto social y ambiental. En este caso, la lupa está puesta sobre Catamarca, adonde “el extractivismo avanza con furia provocando desastres ecológicos” en medio de “gobiernos provinciales y nacionales cada vez más convencidos de que la solución a la falta de inversiones y la escasez de divisas pasa por entregar los recursos naturales”, según afirma la autora de este artículo.
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